Se hace la remake de "La Banda del Golden Rocket". A vos, ¿cuál te gustaría que vuelva?

marzo 19, 2009

EN ACTITUD, MENOS DIEZ

Otra vez paso por la miserable situación de que un hombre me abandone. Gracias a Dios, no han sido más que un par, y no la siento tan trágica como la primera. Pero, al fin y al cabo, me han dejado, otra vez, antes de que yo los deje. Y eso es un golpe a mi sistema relacional de "todos-los-hombres-que-nunca-quise-y-nunca-me-quisieron-como-debíamos".
Justo encuentro un artículo periodístico, por no decir bazófico (si es que tal término existe pero, ¡qué bien acentuada de así serlo!), sobre un gurú del amor de algo asi como ¡9 años!. El jovencito aconseja cómo terminar una relación: "realmente creo que lo nuestro no va a funcionar, pero si queres ¡seamos amigos!" pendejo gurú dixit. Y yo que me quejo de que un tipo con más de un cuarto de siglo me corta por mensaje de texto. Realmente, siempre los odié, a los mensajes de texto. Siempre creí que son para aquellos que le temen a una conversación telefónica. Si, siempre me dio a poco carácter; más que poco, a débil, a chiquito, a nada de bravura de espíritu, a poca cosa.
Y así es, mandar a alguien a freír churros (que es mi verdadera vocación) por medio de algo tan frívolo, tan pueril, es de una bajeza incalculable.
Pero yo hago un mea culpa. Porque estoy fehacientemente convencida que de haber demostrádome más (más mala, más distante, más reacia, más remilgada), en forma alguna me hubiesen cometido tal ruindad como la de patearme por un medio tan ligero, tan fútil.
Debo agregar a este sumario de protesta, como un segundo itém que aquella misiva rezaba claramente: este sujeto por el cual sucumbí habia conocido a "alguien".
¿A quién conociste?, ¿al Dalai Lama?, ¿al cantante de Damas Gratis?. ¿Qué clase de mentecato, botarate se refiere a que está en pareja en ese modo?.
A mi me gustaría saber con qué clase de persona he estado tratando todo este tiempo. Apuesto mi brazo, ¡que de seguro este tipo es un cínico!. ¿Qué clase de gente exige cosas que él mismo no ha de cumplir?, ¡ah, claro: un cínico!.
A mi me tendría que haber plantado cara a cara, como me plantaba para cantarme las cuarenta cada vez que yo me equivocaba, o me mandaba mis pendonerías, y decirme: "mira, María, estoy con otra persona más madura, con la vida más vivida y con los objetivos más en claro que vos; y no llores, ni de bronca llores, porque en la vida te vas a cruzar con tantos caraduras y desvergonzados como yo, que no te van a alcanzar ni todas tus lágrimas para destilar tu bronca, teniendo que terminar reventándoles docenas de huevos en los frentes de sus casas o asesinándoles a sus familiares".
Pero ni eso, che. Ni una pizca de advertencia, ni un séquito de personas extrañas que me miren raro, como avisándome que este tipo se iba a comportar conmigo como un chico. Ni siquiera eso. Ni un amigo suyo que me advierta. Ni un amigo mío que le haya cazado al vuelo sus intenciones inconscientes. Debo reconocer que nos tenía a todos embelesados con su perfecta vida normal, ubicada y asquerosamente apaciguada. Y cuando digo a todos, es a todos. Hasta al más viejo y curtido zorro (o zorra, me daba igual).
Pero como siempre, luego de que algo se termina, hago el balance positivo, y sólo eso guardo. Guardo mi cuarto de sambayón y su frutilla a la panna, guardo canciones que cada vez que suenen me lo harán recordar y guardo su número de telefóno, para más adelante, cuando se me pase la bronca, para ver en qué anda y por ahí, ¿quién te dice?. Porque, por encima de todo, siempre fue un tipo buena onda, y eso si que no lo voy a boicotear.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola Mari, me gusta lo que escribiste. No porque está bueno lo que te pasó, sin dudas no lo está, pero sí por la forma en que te descargaste.
Las calles están hartas ya de tantos cínicos e hipócritas... Pero creo que lo mejor sería no pensar que conocerás a muchos más de éstos que te lastimarán con la misma crueldad, sino CREER que vas a saber identificarlos a priori, mirarlos con repugnancia de entrada y buscar más allá de estas personas insignificantes... problablemente, de esa forma, encuentres lo que tu alma necesita.


Y que estas experiencias sólo sirvan para fortalecerte y rectificar lo que valés.

Cariños,
Flor Abeledo.

la chuly dijo...

que divina flor escribiendote!!!

Entradas populares